El Sueño Que Despertó.

Eres tan especial, te amo tanto, como jamás imagine amar a alguien. Que aceptes mi amor me hace tan feliz, me llena de gozo, mi pecho tiembla y mi corazón palpita con tanta fuerza que ciento que explotara en cualquier momento. Todo lo que veo me trae tu recuerdo, todo en el mundo se ha convertido en ti.

Contigo el tiempo no parece tener sentido, el no es importante entre nosotros, las barreras del tiempo terminan y solo existe nuestro amor, un amor que se extiende entre el pasto verde y los arboles, como un suspiro eterno de felicidad.

Si, el tiempo es aveces rencoroso, y parece intentar separarnos; por favor no le prestemos atención, el tiempo solo es tiempo, y no es nadie para tomar en cuanta su opinión. En esta historia nosotros somos los protagonistas, Jany, Henri… y sus corazones de mazapán.

Deseo tanto que los días se convirtieran en hojas y que el viento las arrastrara velozmente por el suelo. Ahora que necesito de ti, los días parecen eternos, y cada segundo se mueve con lentitud. Yo también quiero volver al viernes y al sábado, los únicos días, a los que les caemos bien. Seré paciente, verte 10 minutos es suficiente para soportar un día, escribir de ti en la noches, parece tranquilizarme, pero aun así quiero estar contigo, quiero hablarte al oído, escuchar tu voz, tocar tu pelo, volver a escucharte hablar de tu vida, y tus experiencias en las clases programación, quiero estar contigo siempre, verte a los ojos y perderme en ellos y no encontrar nunca la salida.

Jany, lo siento, mi única vocación en la vida es amarte, amarte por siempre, y acompañarte en cada momento, como el viento a las olas del mar,  y el cielo azul, a las mañanas de primavera.

Quiero volver a caminar contigo en la ciudad, aun y cuando no tengamos un rumbo fijo, quiero abrazarte una ves mas, y decirte desde mi corazón, que te amo, que as cambiado mi vida, que todo lo que haces me convierte en el hombre mas feliz del mundo, pareces ser un sueño, el sueño más hermoso que eh tenido, el sueño que mas disfruto, un sueño que despertó, y que ahora eh encontrado.

¡Te amo! No puedo contenerme al decirlo... desde la primera vez que te vi, has estado aquí siempre, en mi mente, en mis sueños, en mi corazón.

Todo lo que eh vivido, parece tan poco ahora que te eh conocido.